Tierra de conejos (Oryctolagus cuniculus), en la Vía Verde de la Plata

Es muy frecuente encontrar memorias e informes ambientales con listados y catálogos de especies  poco creíbles desde un punto de vista de la ecología y características del hábitat que describen. El trabajo de cualquier inventario riguroso de recursos naturales en el entorno conlleva la inversión de largos periodos de tiempo de observación en el medio. Es indiscutible que también será necesario dedicar después mucho trabajo de oficina para la correcta identificación y almacenamiento de los datos,  pero no se podría elaborar con verdadero rigor sin pisar el “monte”.

La excelente labor que está realizando actualmente el equipo del AFE Gestión Ambiental de la Vía Verde de la Plata combina adecuadamente y de forma coordinada el trabajo de campo y el trabajo de gabinete para la elaboración de su inventario de recursos.

De todos los elementos bióticos quizás los más complicados de observar sean los mamíferos. En uno de los últimos inventarios publicados en su blog (ver el blog) el AFE Gestión Ambiental de la Vía Verde de la Plata confirmó el avistamiento de varios ejemplares de conejo (Oryctolagus cuniculus) en lugares próximos al trayecto realizado por la Vía Verde. Dentro de los mamíferos de la zona, el conejo es una de las especies más fáciles de observar. 

Su hábitat ideal es el monte mediterráneo como por ejemplo las series de vegetación de los encinares salmantinos (ver post relacionado), serie presente en el entorno de la mencionada Vía. 

Autóctono de la Península ibérica, se ha convertido en especie fundamental en la base de la pirámide ecológica del ecosistema del monte mediterráneo. Sirve de alimento a especies tan importantes como el Lince ibérico o el Águila imperial por lo que la buena salud de las poblaciones de conejo es fundamental para la expansión a nuevas zonas de estos dos depredadores.

Los problemas del conejo son muchos, entre ellos destacaríamos las enfermedades como la mixomatosis o la hemorragia vírica o la caza abusiva. Pero el mayor problema quizás sea la destrucción de su hábitat. Conservar las series de los encinares como los encinares salmantinos y ecotonos asociados es primordial.