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lunes, 10 de octubre de 2016

Y de repente... dos buitres negros

El conocimiento de los recursos naturales y la programación de actividades que se vayan a realizar en el medio ambiente es una labor fundamental previa antes de ofertar y ejecutar cualquier propuesta. Pero como muchas veces hemos comentado en entradas anteriores, la improvisación debe estar siempre presente ya que los eventos espontáneos en la naturaleza son habituales e imprevisibles.
Por ejemplo, las últimas salidas al entorno realizadas por nosotros para ejecutar actividades de interpretación y educación ambiental, estaban programadas para interpretar básicamente recursos paisajísticos, hidrológicos e históricos. No siendo una actividad específica de observación de aves. No obstante hay que adaptarse a las circunstancias porque, gratamente, se está haciendo cada vez más habitual la compañía de buitres negros (Aegypius monachus) en algunas de nuestras rutas.
En la última salida interpretativa organizada el domingo 9 de octubre de 2016 por la Asociación EMBERIZA, ruta cuyos destinatarios fueron familias de la ciudad de Salamanca, dos buitres negros estuvieron presentes durante un largo rato. Lo que facilitó la interpretación de un recurso ornitológico de primerísimo nivel a las puertas de nuestra ciudad.
Pudimos observarlo en vuelo, identificando todos la silueta tan característica. Pero también estuvieron mucho tiempo en el suelo, algo no muy habitual, que permitió a los participantes de la actividad vivir escenas naturales muy impactantes. Espero que todos disfrutaran igual que lo hicieron los monitores. Personalmente es un verdadero privilegio contar con aves como esta en nuestro territorio.











1 comentario:

  1. It's the unexpected things which happen that make bird watching exciting. I have never seen a Black Vulture but it does look to be a magical, huge creature.

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